Dicen que el nuevo proyecto no es lo que se esperaba cuando adquirieron los pisos.
Los residentes del barrio de Santa Eulalia decidieron en 2019 en una consulta popular la ubicación del nuevo polideportivo del barrio. La plataforma vecinal de la calle Gasómetro, donde se va a construir esta instalación, pide que se haga con dimensiones que respeten a las personas que viven en la zona.
El proyecto de construcción del nuevo Polideportivo de Santa Eulalia no satisface a los vecinos de los bloques colindantes al recinto. Lamentan que el edificio del polideportivo sea demasiado alto y que sólo tenga una separación de 15 metros con las viviendas de al lado. Dimensiones que, dicen, traerán luz natural y afectarán la privacidad de sus hogares.
El conflicto se hace aún más evidente entre los vecinos del bloque que da a la calle Cooperativa, construido en 2008. Argumentan que el nuevo proyecto difiere de lo que se planeó cuando adquirieron los pisos. El Plan General Metropolitano vigente en ese momento preveía que la instalación tuviera una altura tres veces inferior y ocupara sólo una parte de la parcela. Josep Maria Reyné es miembro de la Plataforma Vecinal Gasómetro y explica que «el equipamiento estaba previsto como un edificio de una sola planta y no ocupaba toda la parcela».
Desde esta plataforma, aunque respetan el resultado de la consulta en 2019, piden replantearse el proyecto. Así, proponen construir un polideportivo más pequeño en el Gasómetro y, al mismo tiempo, trasladar a otros espacios algunas de las instalaciones previstas en el equipamiento y afirma Reyné «aprovechar, por ejemplo, la zona de Can Trinxet o bien llevar las competiciones al Gornal».
La Plataforma de Vecinos Gasómetro ha iniciado una campaña de recogida de firmas y no descarta llevar el asunto a los tribunales.